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El técnico del Viveros Herol, que el año que viene entrenará al BM Valladolid, afirma que “aquí he disfrutado, aprendido y crecido como persona”.

Dicen que las despedidas suelen ser amargas, pero para quitar ese mal sabor de boca lo mejor es rodearse de buena gente, y así convertir la pena por marcharse en alegría por poder contar, siempre que se necesite, con buenos amigos en el lugar que se deja.
El pasado sábado, el entrenador del Viveros Herol Balonmano Nava, Nacho González, vivió su último encuentro en el banquillo navero, con una clara victoria ante el Casi La Cañada Almería y dejando al equipo en una meritoria tercera posición, rozando la fase de ascenso.
Fue, por ello, una despedida dulce a un técnico joven que llegó a Nava de la Asunción con tan solo 23 años, y que ha vivido “dos temporada muy bonitas, en las que he disfrutado y he aprendido muchísimo como entrenador. Además, aquí he crecido como persona. Por eso el Balonmano Nava siempre va a estar en mi corazón, y Nava de la Asunción será mi casa. Siempre que pueda estaré apoyando al Club, ya que creo que hace muy bien las cosas y tiene las ideas muy claras”.

El Viveros Herol Nava queda apeado de la fase de ascenso pese a su victoria frente al Almería.

El Servigroup Benidorm no falló en el derbi alicantino frente al Elche y representará al grupo D, junto al Meridiano Antequera, en la fase de ascenso a División de Honor Plata. Se pinchó el globo del Viveros Herol Nava, que ha completado un final de temporada excepcional. Pero a pocos les importó. Los naveros despidieron la temporada con una gran fiesta y, aunque se quedaron con la miel en los labios ante la posibilidad de asaltar la segunda plaza, volvieron a despedir como héroes a sus jugadores y a un entrenador, que desde Nava de la Asunción pone rumbo a la Liga Asobal.

El último partido de la temporada no tuvo mayor historia. El Viveros Herol Nava superó con facilidad a un rival disminuido por las bajas. El Casi La Cañada Almería se presentó con solo siete jugadores y apenas pudo oponer resistencia. Fue siempre por debajo en el marcador y lo único que le quedó fue el orgullo para evitar una derrota excesivamente abultada. Al Viveros Herol Nava no le hizo falta nada más que apretar el acelerador en momentos puntuales. Eso sí, sus jugadores comenzaron el partido enchufados y por momentos dieron la sensación de estar divirtiéndose sobre la cancha. Lo tenían fácil ante un rival sin recursos, pero se aplicaron en respetar las señas de identidad de su juego y solo bajaron el pistón cuando se vieron con cómodas ventajas.

El Viveros Herol Nava acaba la temporada tercero tras su victoria ante el Almería.

 Nada iba a empañar la fiesta de despedida de la temporada del Viveros Herol Balonmano Nava ante sus aficionados. Ni siquiera la victoria del Benidorm contra el Elche, cuando el resultado contrario les hubiera dado el pase al play off de ascenso a los naveros. Y es que la tarde de ayer tenía que ser alegre, como así fue. Porque la gran familia del Club Balonmano Nava se lo merecía, tras una extraordinaria recta final de temporada que ha hecho que el equipo de Primera Nacional termine la campaña en una excelente tercera posición en el complicado Grupo D. Y porque había que decir adiós como Dios manda a un grandísimo entrenador, Nacho González, que al año que viene se embarcará en la Liga Asobal. Por todo ello y por mucho más, el Viveros Herol Balonmano Nava mereció terminar con una gran victoria ante el Casi La Cañada Almería (41-28).

De todas maneras, el equipo andaluz llegó a Nava de la Asunción con solo siete efectivos en su convocatoria, con lo cual los locales ya contaban con una ventaja importante desde el principio.
De esta forma, los naveros comenzaron moviendo el balón con paciencia ante la defensa con avanzado de los almerienses. De este modo el Nava se distanció 5-3 llegado el minuto 5 gracias a dos cañonazos de Campillo.
Mientras, los andaluces, que comenzaron bien el encuentro, iban sufriendo más desaciertos conforme transcurría el choque, tanto a la hora de lanzar a puerta como en las pérdidas de balón.
Llegado el minuto 10 los naveros iban cuatro arriba. Una diferencia cómoda, sobre todo teniendo en cuenta las facilidades que otorgaban los visitantes, dejando al pivote Nico López recibir con comodidad y marcar.