Empate de fe y de constancia
El Viveros Herol BM Nava suma un punto en Huesca gracias a un gol desde los siete metros del italiano D´Antino.
Foto: Andrey Sapizhak
El que la sigue, la consigue. El Viveros Herol BM Nava buscaba algo positivo de su visita a Huesca y lo consiguió in extremis gracias a ese último gol del extremo transalpino Nicola D´Antino, en una acción final donde los árbitros sancionaron con siete metros el hecho de que el rival no dejara sacar de centro después de haberse adelantado el conjunto oscense. Un empate a 28 que supo a victoria, incluso más que el punto conseguido en el duelo regional frente a Valladolid.
Pero una vez más toco remontar a un mal inicio de partido. Cinco minutos tardó el cuadro navero en anotar su primer gol, y para entonces el rival ya ganaba 4-0. Una desventaja que llegó a ser de 8-3 o de 10-5 durante el primer cuarto de partido. Se repetía esa mala primera parte que había criticado el técnico del BM Nava y se repetía la necesidad de reaccionar para no regalar el partido antes de tiempo.
Esa reacción llegó en el tramo final de la primera parte. Con mayor seriedad defensiva y mayor acierto en ataque, los de Zupo Equisoain se fueron acercando en el marcador hasta irse al descanso con una renta en contra de tan solo dos goles, 15-13. Una diferencia que dio más ánimos a los naveros a un rival que veía que su trabajo tenía escaso premio.
El segundo tiempo fue mucho más igualado. Una diferencia de dos o tres goles para los locales, que por momentos fue igualada e incluso por momentos superada por el Viveros Herol. En el minuto 8 el marcador reflejaba un 17-18 que invitaba a soñar. A partir de ahí, el cuadro navero estuvo en partido gracias a las paradas de Patotski y luego de Pleh pero también gracias al acierto de hombres como Prokop o el italiano D´Antino, que a la postre sería el protagonista del encuentro.
Porque en los últimos diez minutos tocó la enésima remontada. El Bada Huesca cobró una renta de dos goles que parecía casi definitiva. Viveros Herol echó arrestos para reducir la diferencia y entrar en los últimos tres minutos con una diferencia mínima en el marcador, 27-26. Luego llegaría un nuevo tanto oscense que parecía definitivo a menos de 60 segundos para el final. Sin embargo, una recuperación, un gol, un saque de centro que fue obstaculizo por el rival y sancionado por los árbitros, llevó el partido a un último segundo donde el extremo italiano Nicola D´Antino se plantaba ante el portero para hacer el gol que ponía el definitivo empate a 28. Un punto con sabor a victoria.
