Fin de fiesta perfecto

Viveros Herol Balonmano Nava cierra con victoria (27-28) ante Helvetia Anaitasuna una temporada histórica y acaba sexto con 33 puntos.

Foto: Óscar Aznar.

Llegó el final de la Liga Plenitude y con él, el final de una temporada histórica en la que Balonmano Nava (recordemos, recién ascendido) ha acabado sexto en la clasificación tras una campaña impecable en la que, si la primera vuelta fue buenísima, esta segunda la ha superado, habiendo conseguido 15 y 18 puntos respectivamente. La última victoria, la de ayer ante Helvetia Anaitasuna, en un partido en el que los de Álvaro Senovilla hicieron valer una primera parte brillante en la que sometieron a su rival de principio a fin en una gran actuación en todas las fases del juego.

Como decimos, en la primera mitad Balonmano Nava fue como un huracán, metiéndolo (casi) todo en ataque, con una defensa férrea y dura que dejó en 11 goles a su rival y con un gran Luis de Vega en portería. Tanto es así que ya en el minuto once Quique Domínguez se vio obligado a parar el encuentro ya que su equipo no era capaz de frenar las embestidas del ataque navero, con Moyano y Prokop a la cabeza, y en defensa los jugadores naveros se convertían en un auténtico muro con Luis aportando también bajo palos, llegando al minuto 11 con 3-8 en el electrónico. Pero Balonmano Nava seguía como un martillo y, aprovechando la exclusión a Josu Arzoz, ampliaba la ventaja hasta los siete goles (3-10) cuando llegábamos al ecuador del primer tiempo, con Gedeón marcando a puerta vacía y Vila al contraataque tras dos muy buenas defensas.

Balonmano Nava estaba siendo claro dominador del encuentro, poniendo los ocho tantos de diferencia y obligando al técnico del conjunto navarro a solicitar su segundo tiempo muerto en apenas 17 minutos de juego. Así, el conjunto de Nava de la Asunción no quitó el pie del acelerador, manteniendo siempre una ventaja de 6/7 goles a medida que pasaban los minutos, llegando al descanso con una renta de siete tantos (11-18) que reflejaba claramente que en la pista casi solo había existido un equipo, y ese equipo iba de azul. Se notaba que los jugadores naveros querían despedirse por todo lo alto de la temporada.

Foto: Óscar Aznar.

No le sentó demasiado bien el paso por vestuarios a Balonmano Nava, que veía cómo iba a tardar seis minutos en anotar su primer gol de la segunda mitad. Aunque bien es cierto que Helvetia Anaitasuna tampoco supo aprovechar del todo esa sequía goleadora con alguna que otra precipitación y también estrellándose con Luis de Vega, reduciendo la diferencia solo dos goles (13-18). Pero el conjunto navarro había salido con otro aire tras el descanso, aumentando su intensidad en defensa, y a Viveros Herol le costaba algo más perforar la potería defendida por Iñaki Martínez. Así, los navarros se pusieron a cuatro goles, que pudieron ser tres tras una pérdida en ataque de Isaías Guardiola que Iñaki Martínez no aprovechó tras una precipitación, haciendo que Álvaro Senovilla solicitase tiempo muerto casi en el minuto 12 de juego de la segunda parte.

Pero bastó con que Pancho anotara dos siete metros consecutivos y Moyano aprovechase una parada de Luis de Vega a Ander Torriko para que Balonmano Nava se volviese a mover por una ventaja que daba relativa tranquilidad pasado el ecuador de los segundos treinta minutos (18-24). Y digo relativa porque las sensaciones sobre la pista habían cambiado: a Balonmano Nava le costaba un poco más entrar con claridad en la defensa de Helvetia Anaitasuna, situación que el equipo de Pamplona aprovechaba para poner de nuevo los cuatro goles de diferencia cuando quedaban diez minutos de juego.

Así en los últimos seis minutos Balonmano Nava solo fue capaz de anotar un gol, pero no nos adelantemos. En el electrónico 24-27, la afición local apretaba a sabiendas de que su equipo la necesitaba y Balonmano Nava cometía dos pérdidas en ataque y un pasivo que Antonio Bazán y Ander Torriko iban a aprovechar para poner a su equipo a tan solo un gol (26-27) con un minuto de juego por delante. Pero entonces apareció el más listo de la clase, Tomás Smetánka, que lograba superar a Juan Bar para poner el 26-28 con el que los de Álvaro Senovilla respiraban más tranquilos. Además, Luis de Vega también quería seguir sumándose a la fiesta deteniendo el lanzamiento de Edu Fernández y, aunque Ander Torriko acabó poniendo el 27-28, no había tiempo para más, dando paso al final de fiesta perfecto para Balonmano Nava.

Foto: Óscar Aznar.

Con la derrota del Atlético Valladolid, Balonmano Nava acaba sexto en la que ha sido la mejor temporada de su historia en la máxima categoría del balonmano español y de la que se nos acaban los calificativos para este equipo. Ahora, vacaciones, y bien merecidas. Naveros, nos vemos la temporada que viene.

Ficha técnica:

Helvetia Anaitasuna (27): Juan Bar (p), Álvaro Gastón (3), Antonio Bazán (2), Edu Fernández (2), Josu Arzoz, Nico Bonanno, Pablo Itoiz, Iñaki Martínez (ps), Niko Martinovic, Martín Ganuza (2), Ander Torriko (7), Aitor García (3), Xabier González (1), Mikel Redondo (1), Aitor Albizu (4), Oleg Kisselev (2), Julen Elustondo.

Balonmano Nava (28): Luis de Vega (p), Andrés Moyano (7), Borja Méndez (1), Isaías Guardiola (1), Jakub Prokop (7), Dzmitry Patotski (ps), Andrés Vila (1), “Pancho” Ahumada (3), Daniel Pérez (1), Mario Nevado, Óscar Marugán, Gonzalo Carró (1), Pablo Herranz (1), Gedeón Guardiola (1), Tomás Smetánka (4) y Roberto Pérez.

Parciales cada cinco minutos: 1-4, 3-6, 3-10, 6-13, 9-17, 11-18 (Descanso); 13-18, 16-20, 18-24, 21-25, 23-27, 27-28.

Árbitros: Oriol Álvarez Boixaderas y Raúl Escoda Pérez. Excluyeron a Josu Arzoz (1), Oleg Kisselev (1) y a Nico Bonanno (1) por parte de Helvetia Anaitasuna y a “Pancho” Ahumada (1), Tomás Smetánka (1) y a Gonzalo Carró (1) por parte de Balonmano Nava.

Incidencias: Partido correspondiente a la jornada 30 de la Liga Plenitude disputado en el Pabellón Anaitasuna. Gran presencia de aficionados naveros.