El Viveros Herol Nava, colíder tras su victoria en Pamplona

Este triunfo frente al Anaitasuna, unido al empate del Covadonga en León, hace que los naveros igualen a puntos con los líderes asturianos.
El Viveros Herol Nava logró una victoria muy valiosa en una chancha tan complicada como la de Anaitasuna, manteniéndose invictos y segundos en la clasificación tras el Covadonga, que después de empatar en la cancha del Universidad de León Ademar sigue líder, pero con los mismos puntos con los naveros.
Con un juego muy igualado y prevaleciendo los ataques sobre las defensas, transcurrieron los primeros 20 minutos del encuentro. Un periodo en el cual brilló por encima de todos los jugadores el portero navero, Ángel González ‘Blas’, que realizó de nuevo una gran actuación convirtiéndose en el portero más en forma de los tres con los que cuenta Raúl Álvarez en plantilla, firmando un 41% de efectividad en los primeros 30 minutos.
Anaitasuna salió a la pista con la lección bien aprendida y, basando su juego en la velocidad, puso a prueba a la defensa navera una y otra vez. Pero Ángel González y sus paradas metió a los suyos en la contienda.

Aunque cometió algunos fallos en ataque, pérdidas fáciles y falta de finalización, el Viveros Herol no perdió la cara al partido y tras los primeros 20 minutos de igualdad se produjo la reacción. Los de Nava de la Asunción afianzaron su defensa, recuperaron balones y facilitaron la salida al contrataque de Bruno Vírseda, que logró el 14-14.
Con la defensa bien colocada y un Ángel González inmenso, a los naveros solo les faltaba centrarse en ataque, y así lo hicieron desde todas las líneas, con goles de Roberto Pérez, Guillermo Campillo, Alberto García –que logró un golazo, dando muestra de su excepcional muñeca– Darío Ajo y Bruno Vírseda. Así, marcaron un parcial de 0-6 que Anaitasuna solo fue capaz de romper a 8 segundos del descanso, y tras casi 8 minutos en blanco.
En la reanudación, el partido fue al contrario de su inicio, predominando las defensas. Solo Roberto Pérez, tras 4 minutos y 35 segundos de juego fue capaz de mover el marcador, poniendo el 16-21.
En el minuto 40 Alberto García sufrió un esguince de tobillo que le obligó a abandonar la cancha, perdiendo así el Viveros Herol a uno de los mejores jugadores del partido.
Transcurrían los minutos y los naveros controlaban la diferencia, por lo que el equipo local realizó un cambio en su sistema de juego, pasando a una defensa abierta 3:2:1 muy presionante, que penalizaba cada fallo en el ataque rival con rápidas transiciones, permitiéndose anotar de manera fácil. Así, se redujo la diferencia a 2 goles (29-31).
AFICIÓN DE NAVA
Los aficionados naveros, que en una veintena acompañaron a su equipo, no dejaron de animar a los suyos, sabiendo de la importancia de no perder la ventaja a su favor. Pero fueron de nuevo los locales –a través de Álvaro Gastón y a falta de 33 segundos para el final– los que marcaron, poniendo el 31-32 en el luminoso y el corazón en un puño a los naveros.
Pero la preocupación no pasó de ahí, y tras un ataque visitante donde sufrieron numerosas faltas y parones de tiempo, fue el capitán Carlos Villagrán quien marcó el definitivo 31-33.

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