El Nava no da con la tecla
El conjunto navero, que fue siempre a remolque, cae en su visita al BM Caserío Ciudad Real (30-27) tras un partido en el que los de casa fueron dominadores del juego prácticamente los 60 minutos.

Foto: José Ramón García Carpintero.
Balonmano Nava no parece dar con la fórmula. Y es que en la mañana de ayer los de Álvaro Senovilla volvieron a caer, esta vez ante un rival de “su liga”, en un encuentro en el que siempre fueron por detrás en el marcador y en el que se vieron superados por un BM Caserío Ciudad Real dueño de lo que pasaba sobre la pista del Quijote Arena prácticamente durante todo el partido, castigando en ataque a los naveros, sobre todo, desde los siete metros con un Alonso Moreno infalible y desde el pivote con Omar Sherif, y realizando una defensa a la que a los jugadores del Viveros Herol Balonmano Nava les costaba un mundo superar. Una derrota muy dura que tiene que servir para aprender de los errores y, sobre todo, para coger impulso y levantarse. Porque hay que levantarse.
Ya el comienzo del partido parecía presagiar lo que iban a ser los sesenta minutos. Un inicio arrollador de los de Ciudad Real ponía el 3-0 en un abrir y cerrar de ojos ante un Balonmano Nava que todavía se estaba quitando las legañas. Sí hubo reacción esa vez por parte del conjunto navero, que le devolvía el parcial a su rival con un Buda en portería que se estaba empezando a entonar para poner las tablas en el electrónico. Pero los de Nava de la Asunción iban a rachas, con un ataque que no estaba sabiendo leer la defensa local, y BM Caserío lo aprovechaba a las mil maravillas para correr y poner tierra de por medio (7-3), provocando el primer tiempo muerto de Álvaro Senovilla en el minuto 11.
Funcionó, en gran parte porque la defensa navera aumentó la intensidad, algo que se vio reflejado en recuperaciones y también en goles rápidos con Tahu y Rui corriendo el contraataque, poniendo de nuevo el empate en el marcador (7-7) y haciendo que fuera ahora Santi Urdiales el que parase el partido. BM Caserío Ciudad Real volvió a conseguir una renta a su favor, en gran parte por los siete metros de un Alonso Moreno que no fallaba, y esta vez iba a ser la definitiva porque, si no era una pérdida, era un lanzamiento fuera, al palo, o detenido por Giovagnola. El caso es que a Balonmano Nava le costaba horrores superar la zaga local, yéndonos al descanso con un 15-11 que hacía indicar que algo tenía que cambiar.

Foto: José Ramón García Carpintero.
Pero no lo hizo y tras el paso por vestuarios la tónica fue la misma. Para más inri, una doble exclusión, primero a Lilian Pasquet y segundos más tarde a Pablo Herranz, le ponía las cosas más difíciles a Balonmano Nava, aunque lo solventó con que no pasara nada, ni para bien ni para mal, durante esos dos minutos. Fue entonces cuando volvió a surgir la figura de Santiago Giovagnola bajo palos, que durante casi siete minutos echó el cerrojo a su portería, negándole el gol una y otra vez a los jugadores naveros, mientras que en el otro área entraban prácticamente todos los lanzamientos, con Jorge Romanillos poniendo el +6 en el electrónico (21-15).
Tuvo una pequeña reacción Viveros Herol, con Brais González como principal amenaza ofensiva y con la defensa navera forzando bien varias faltas en ataque, para reducir diferencias hasta los 3 goles a falta de 10 minutos para el final, pero un tiempo muerto de Santi Urdiales más otra exclusión a Gonzalo Carró frenaron el intento de conseguir algo positivo de la visita a Ciudad Real. De nuevo los siete metros anotados por Alonso Moreno penalizaron a un Balonmano Nava que veía cómo su rival se marchaba definitivamente en el marcador con el 27-22, situación que obligaba a solicitar su último tiempo muerto Álvaro Senovilla a falta de menos de cinco minutos para el final. Pero Balonmano Nava estaba muy tocado y BM Caserío se aprovechó de ello para aumentar la renta hasta los siete tantos, la máxima del partido y, aunque en los últimos minutos el conjunto navero se acercó en el luminoso, la sensación era que los de casa, que jugaban con el reloj de su lado, lo tenían todo bajo control para que finalmente sonase la bocina con el 30-27.
La derrota duele, pero también enseña. Ahora es cuando toca estar unidos, cuando toca ser un equipo. Toca levantarse, y eso se hace estando todos juntos, afición y jugadores. El próximo domingo, una nueva batalla, a vuestro lado.
Ficha técnica:
BM Caserío Ciudad Real (30): Santiago Giovagnola (p), Franco Mendive, Juan Manuel Lumbreras, David Fenández (4), Alonso Moreno (9), Jorge Romanillos (2), Víctor Morales (1), Daniel Palomeque, Javier Domingo (2), Ángel Pérez de Inestrosa (1), Sergio López (3), Álvaro Morales (ps), Omar Sherif (5), Sergio Casares (1), José Andrés Torres y Juan Gull (2).
Balonmano Nava (27): Brais González (3), Edu Reig (3), Alfredo Otero (2), Davide Pugliese, Gonzalo Carró (1), Óscar Marugán (1), Josu Arzoz (2), Mateus “Buda” (p), Lilian Pasquet (2), Javier Carrión (1), Rui Baptista (4), Joao Bandeira (1), Nico Bonanno, Tahu Lufuanitu (5), Dzimitry Patotski (ps) y Pablo Herranz (2).
Parciales cada cinco minutos: 3-2, 6-3, 7-6, 9-8, 12-9, 15-11 (Descanso); 17-14, 19-15, 22-16, 23-20, 26-22, 30-27.
Árbitros: Yon Bustamante López y Javier Álvarez Mata. Excluyeron a Juan Manuel Lumbreras (2), Omar Sherif (1) y a José Andrés Torres (1) por pare de BM Caserío Ciudad Real y a Gonzalo Carró (2), Lilian Pasquet (1) y a Pablo Herranz (1) por parte de Balonmano Nava.
Incidencias: Partido correspondiente a la jornada 5 de la Liga NEXUS ENERGÍA ASOBAL disputado en el Pabellón Quijote Arena.



