El análisis | Puerto Sagunto, experiencia y talento
El Viveros Herol Bm. Nava se enfrenta este fin de semana a Fertiberia Puerto Sagunto en un duelo directo por la permanencia.
Los porteños llegan a la cita con un colchón de distancia respecto al descenso. La victoria en la jornada pasada ante Cangas otorgaba a Puerto una bombona de oxígeno importante.
Vicent Enric Nogués tiene a su disposición una plantilla cargada de experiencia y talento a partes iguales. Tras un inicio dubitativo de liga, han sido capaces de recomponer la situación. Han sacado dos triunfos y un empate de los últimos cinco choques.
Diógenes Cruz aparece a los mandos de la nava. El carioca es sobresaliente en la dirección de juego. Si la defensa no está bien ajustada, lo aprovecha para que el balón termine en el fondo de la red.
Guillermo Corzo, Jaka Spijak y Alexandre Tello son los laterales izquierdos. El cubano es un veterano de guerra por el que no parecen pasar los años. Jaka es el especialista defensivo en la 6:0 junto a Marcos Dorado, pero cuando tiene que asumir labores ofensivas, no desentona. Tello, viejo conocido de la afición navera, también se muestra peligroso cuando saca su brazo a pasear.
En el flanco contrario, Facundo Querín sigue perforando porterías a los 38 años. El internacional argentino aporta gol y contundencia en la retaguardia.
Dos estiletes brillan en las esquinas del 40×20. Antonio Alegre e Ignacio Mirallave lucen su técnica en la definición desde los extremos. Rápidos al contraataque, cuentan con un porcentaje de efectividad de más del 70%. Si les das un metro, la bola acaba dentro.
El pivote es para Alexandro Pozzer. El brasileño destaca por su imponente físico. La zaga sufre mucho cuando está en la pista. Recibe desde en cualquier posición y sobresale en el lanzamiento.
Jugadores a seguir:
David Bruixola: El arquero es un seguro de vida. Sempiterno. No pierde la agilidad ni los reflejos. Si tiene el día, te amarga.
Guillermo Corzo: Imparable. Tiene el gol en la sangre. Es un francotirador. No importa la zona. Si le das espacio para apuntar, estás muerto.
